El viaje de los muertos

Unos dicen que hay una luz al final del tunel, otros que si la luz al final del tunel se te acerca te corras, pues podria ser un tren. Algunos lo toman como un chiste, pero este tren existe y es habitado por los mas horrendos cazadores de almas. Algunos despiadados acaparan varios asientos para capturar a descuidadas victimas, otros los ceden para ganar la confianza del futuro difunto. En el coche comedor los perros calientes no son una salchicha entre 2 panes, alli podemos encontrar los mas repulsivos platos diseñados por el Chef a bordo. Algunos pasajeros se encuentran anclados en los mismos asientos desde hace siglos y otros se difuminan por el aire ante el estridente sonido del claxon con la inminente llegada de un paso a nivel. La maquina que lo impulsa no lleva ningun combustible conocido, el conductor nunca ha sido visto, la proxima parada no sabe de su arribo. No existen leyes ni reglas pero hay algo que distingue a todos quienes en ese lugar su alma han extraviado...todos ellos son fotografiados.